¡¡Hooola amig@s!!
Cuánto tiempo sin
pasar por aquí. Meses, 6 meses para ser exactos. La verdad es que la vida a
veces nos hace renunciar a las cosas que más nos gustan, y eso es lo que me ha
pasado a mí. Nuevas responsabilidades profesionales apenas me dejan tiempo para
coser. Pero bueno, las cosas son así, y hay que afrontarlas como vienen.
A veces, lo peor de empezar
un proyecto, o terminar alguno de los que tenemos a medias, es prepararlo todo,
sacar todas las cosas de costura y ponerte a ello. Es por eso que en estos
últimos tiempos me estoy dedicando a acolchar, no me da ninguna pereza porque
solo es acercarme mi nuevo bastidor y mi costurero y ya está, puedo relajarme y
distraerme un ratito.
Este bastidor me lo regaló mí marido el año
pasado. Es una maravilla, me refiero al bastidor. Mi marido también, pero no voy
a hablar de él en esta entrada, jejejeje. Lo compró en Mías Patch, ya todas
conocen su tienda, pasar por allí un ratito es una experiencia fantástica, ver todos los
trabajos tan bonitos y estar con ella, te reconforta.
Ahora estoy acolchando
mí Mystery Quilt de Véronique Réquena, me encanta esta labor. Estoy intentando
hacer el acolchado en ecos, tal y como lo hizo su autora en el libro.
El bastidor es grande y
puedo acolchar con comodidad, sin tener que estar cambiando constantemente la
labor. Y cómo la superficie de acolchado
es tan amplia puedo tener la tijera y la aguja siempre a mano, gracias a estos
maravillosos imanes.
Bueno amigas, espero
retomar la buena costumbre de ir publicando alguna cosita.
¡¡Besitos a tod@s y,
por favor, sean muy, muy felices!!
